CAPITULO 1
LA BIBLIA Y SUS ASPECTOS GENERALES
PROCESO
HISTÓRICO
El nombre que más se usa
para designar a la Palabra de Dios es el de Biblia. La Biblia no vendría hacer
un solo libro, sino más bien un compendio de libros. La palabra "Biblia" deriva del vocablo griego Bí - bli -
a, que es plural de la palabra Biblión, que significa "Los libros" o
"Los Libritos". La procedencia del vocablo griego Biblia deriva
posiblemente de Biblos, este era un importante puerto comercial del Mediterráneo
Oriental donde se compraban papiros y otros materiales necesarios para
escribir.
En
el siglo primero se escribía sobre papiros. El papiro se obtenía de la planta
del mismo nombre. En el interior del tallo de la planta existen unos
largos filamentos a partir de los cuales se elaboraban los papiros
utilizados para la escritura.
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PLANTA DE PAPIRO |
En la antigüedad los rollos de papiro
constituían el vehículo más importante para la transmisión y conservación
del conocimiento humano. La nación que ha conservado mayor número de papiros es
Egipto. Ello se debe a que el papiro sólo resiste largo tiempo en climas muy
calientes y secos.
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PREPARACIÓN DEL PAPIRO |
Sólo siglos después (en el siglo IV)
comenzará a utilizarse el pergamino, formado por piel de animales, las cuales,
convenientemente tratadas, se reducían a hojas finas y lisas.
En
un primer momento los papiros se utilizaban en el llamado formato “rollo”. Sólo
se escribía por una cara y para leer había que desenrollarlo hasta el
lugar deseado. Los judíos tenían La Torá escrita en rollos. Un rollo de fax se
parece mucho a un rollo antiguo
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ROLLO DE PAPIRO |
Ya en la segunda mitad del siglo I los cristianos comienzan a utilizar el formato códice, que es como los libros actuales. Se escribe por las dos caras, encuadernando los papiros como los actuales libros. Las ventajas prácticas del formato códice eran evidentes: se ahorraba papiro, puesto que se escribía en ambas caras de las hojas; tenía un formato compacto y a menudo cabía en un bolsillo; era fácil de manejar y podía hojearse de prisa buscando una referencia; era fácil de guardar y también de ocultar en épocas de persecuciones. En concreto, y para los cuatro Evangelios y los Hechos se necesitaba un sólo códice, en lugar de cinco rollos, con lo que resultaba más fácil enviar los textos cristianos por todo el imperio.
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CÓDICE |
GENERALIDADES
Nuestra Biblia en su conjunto agrupa a 66 libros escritos en tres
idiomas: Hebreo, Arameo y Griego, y en tres continentes: Asia, África y Europa.
Fue escrito por unos 40 autores que vivieron en diferentes épocas, en un lapso
de 1600 años, desde 1513 a. C. Hasta cerca del año 98 d.C.
La Biblia contiene 1,189 capítulos, 929 capítulos en el AT y 260 en el NT. Y distribuidos en 594 capítulos antes del salmo
118 y 594 después del salmo 118. El centro de la Biblia es el salmo 118: 8. El
capítulo 29 del libro de Job es el centro del AT y el capítulo 8 de Romanos es el centro del
NT. Existen 3’566,480
letras, 773,693 palabras, 31,102 versículos y 3,573 promesas aproximadamente.
El libro más corto de toda la Biblia es la epístola de 2 Juan; contiene
sólo un capítulo con trece versículos. Por
el contrario, el más extenso es el libro de los Salmos con 150 capítulos, y el
segundo es Isaías con 66 capítulos. El capítulo más grande es el salmos 119 y el
salmos 117 es el capítulo mas pequeño. El versículo más grande de
toda la Biblia se encuentra en el libro de Esther, en el capítulo 8, versículo
9; y el más pequeño es Éxodo
20:13 y Juan 11:35 (ambos versículos tienen 9 letras si consideramos que la
letra “LL” es una doble letra “L”).
El AT termina con una
Maldición y el NT con una bendición.
Según algunos estudios, dicen que el
libro de Isaías es la Biblia en miniatura. Veamos: Isaías tiene 66 capítulos,
la Biblia 66 libros. El 1er capítulo de Isaías comienza como Génesis: la
desobediencia y el pecado del hombre. El capítulo 40 de Isaías profetiza sobre Juan
el bautista, y el libro N° 40 de la Biblia es Mateo el cual habla de Juan el
Bautista. El último capítulo de Isaías termina en el verso 22. Dice: "Como
los cielos nuevos y la nueva tierra" al igual que Apocalipsis, y el último
verso de Isaías termina sobre la condenación del hombre impío, como también lo
dice Apocalipsis.
La notable unidad y
coherencia de la Biblia confirma que es auténtica y revela un solo autor: El
Espíritu Santo (2 Tim. 3: 16).
La Biblia es el libro más
antiguo del mundo que aún sobrevive. Cada año se distribuyen unos sesenta
millones de Biblias o porciones de ella. La primera edición impresa con
caracteres móviles salió de la prensa del inventor alemán Johanes Gutemberg en
el año 1455. Hasta entonces el que quería una Biblia, o parte de ella, tenía
que copiarla o pagar a quien se las copiase.
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LENGUAS DE LA BIBLIA |
Otro de los idiomas en que
fue escrita la Biblia es el arameo, que era una lengua de escritura muy similar
al hebreo. Después de la deportación de Babilonia se comenzó a utilizar este
lenguaje entre los judíos, tal es así que en los tiempos de Jesús el arameo era
el idioma de uso común. El evangelista Marcos tradujo varias palabras del Señor
Jesús que fueron dichas en arameo, como por ejemplo:
ö
Talita Coiné = Niña levántate (Mr. 5: 41)
ö
Corbán = Mi ofrenda a Dios (Mr. 7: 11)
ö
Efata = Sé abierto (Mr. 7: 34)
ö
Eloi, Eloi ¿lama sabactani? = Dios mío, Dios mío ¿Por qué me has
desamparado?
(Mr. 15: 34)
SU SUPERVIVENCIA
La Biblia,
empero, no sólo es única por su supervivencia durante los tiempos sin imprenta,
sino también por la supervivencia bajo muchas acometidas implacables. Durante
siglos hubo hombres que intentaron destruirla y quemarla. Reyes y césares
incluso líderes religiosos lo consiguieron con celo fanático. Diocleciano, en
303 d.C., ordenó la erradicación de todos los cristianos y su santo libro. Fue
la mayor acometida contra la Biblia: murieron cientos de miles de cristianos y
casi todos los manuscritos de la Biblia fueron destruidos. Sin embargo, la
Biblia volvió a emerger rápidamente, y la ironía de la historia fue que, 22
años después, Constantino, en el 1er concilio ecuménico, elevó la
Biblia a autoridad infalible. Asimismo encargó a Eusebio hacer 50 copias de la
Biblia a costa del gobierno. Algo semejante ocurrió con frecuencia. El
racionalista francés, Voltaire, muerto en 1778, se atrevió a decir que la
Biblia, luego de 100 años, sólo sería una antigüedad; pero a los 50 años de su
muerte, la Geneva Bible Society inauguró su imprenta y casa para producir
montones de Biblias.
Al Imperio
Romano sucede la Edad Media. La Iglesia Romana privó al pueblo de la Biblia tan
eficazmente que durante siglos fue casi desconocida. Lutero, según nos dice, ya
era adulto cuando viera una Biblia. Por decisiones conciliares y anatemas
papales, las Biblias fueron quemadas en público, y lectores de la Biblia
condenados, martirizados y quemados vivos por la Inquisición. Luego de la
Reforma, llegó un lento cambio al respecto. En Alemania brotó una legión de
racionalistas que concibió los ataques más salvajes y violentos. Pero desde
entonces la Biblia es más divulgada, leída y querida que nunca. Los enemigos
han muerto, sus acometidas fueron rechazadas, y la Biblia se mantiene firme
como una roca.
|
MARTÍN LUTERO |
¿Qué libro
puede comparársele? Es el más divulgado, porque es el más querido en la tierra.
Pero lo asombroso es que, al mismo tiempo, sea el más citado y criticado del
mundo. Ni un capitulo ni una línea se vio libre de crítica; ¿hay otro libro en
la literatura al que le ocurra esto? Sí, hay muchos que también han sido muy
criticados; pero éstos cayeron en el olvido.
CAPITULO 2
AUTENTICIDAD DE SU INSPIRACIÓN.
Existen hoy en día
diferentes hipótesis sobre la autenticidad de la inspiración de Biblia de entre
las cuales sólo nos ocuparemos de dos de ellas:
1.
Lo que creemos los cristianos
2.
Lo que creen los "liberales" (se les da este nombre a un
grupo de personas que distorsionan las sanas doctrinas de la Biblia).
CREENCIA DE LOS CRISTIANOS.
Los cristianos nos
añadimos a la creencia de lo que la tradición de los judíos piadosos han
creído, que los libros del AT. han sido inspiradas por Dios (2 Tim. 3:
16, 1 Ped. 1: 21)
y escritos por Moisés y por los profetas, creemos que estos libros fueron
escritos por los hombres cuyos nombres aparecen en el encabezamiento de los
libros, y que escribieron en las fechas que tradicionalmente se han aceptado;
es más creemos que las palabras que el Señor Jesús declaró son eficaces y verdaderas
y el Señor declaró que Moisés escribió los libros de la Ley (Lc. 24: 27;
20:28; Mr. 12: 26 ; Jn. 7: 19).
En cuanto al NT, Jesús dijo
que sus enseñanzas eran las palabras de su Padre (Jn. 14: 10; 17: 14). El
apóstol Pedro hace referencia a las epístolas del apóstol Pablo como
“Escrituras”, catalogándolas así como parte de la Palabra de Dios (1 Ped. 3: 15 – 16).
Cito a continuación
algunas evidencias del porqué la Biblia
es divinamente inspirada, escrita por Luisa Jeter en el libro ¿Cuál camino?
Pág. 122.
ö
Su admirable unidad de tema y falta de contradicciones a pesar de
haber sido escrita por unos cuarenta hombres distintos, en un período que
abarca mil seiscientos años.
ö Su superioridad a
todo lo demás producido por la raza humana en cuanto a moralidad, literatura y
leyes.
ö El cumplimiento de
sus profecías y de sus promesas.
ö Su
indestructibilidad.
ö Su universalidad.
Puede satisfacer el corazón humano en toda época, lugar y condición de vida.
ö
Su referencia a verdades científicas desconocidas para los escritores.
ö
Confirmación de la veracidad de sus partes históricas.
ö
Su poder transformador en los que creen sus palabras.
CREENCIA DE LOS LIBERALES.
|
ESCRIBA |
El otro grupo llamados "liberales" tal parece que se
ciñen a las enseñanzas del apóstata Wellhausen, Julio Wellhausen nació en
Alemania en 1844 y murió en la ciudad de Gottinga en 1918. Este hombre era
profesor de teología, pero no creía en la intervención sobrenatural o divina en
la historia de la humanidad, renunció su fe en Dios y por tanto en los
milagros. Siendo ya un ateo por convicción dedicó muchos años de su vida al
estudio de los libros del AT. llegando a elaborar una teoría en la cual
sostenía que la mayoría de los libros del AT. recibieron su forma actual
después del retorno de los judíos de la cautividad en Babilonia en el año 536
a.C. Según Wellhausen, el Pentateuco no lo escribió Moisés, sino más bien
constituye una recopilación de libros que él mismo inventó y que denomina:
- Fuente Jehovista
- Fuente Elohísta
- Fuente Sacerdotal
En su opinión Moisés no
escribió ninguno de los libros que llevan su nombre, ni Isaías, ni Daniel
escribieron los libros que llevan su nombre.
Tal parece que Wellhausen
adoptó la teoría del médico Francés Jean Astruc quien presentó bajo el nombre
de "Hipótesis documental"
su teoría sobre el origen de la Biblia. En él procuraba demostrar por el
análisis de los estilos literarios del Pentateuco, que éste era sólo una
recopilación de fragmentos de mitos, leyendas y tradiciones, según Astruc,
varios hombres lo escribieron siglos después de Moisés, y señala que sus
escritos han sido recopilados, corregidos y atribuidos a Moisés. Lo más curioso
de todo esto es que la teoría de éste ateo se ha infiltrado en las esferas
intelectuales del cristianismo y se ha convertido en maestro y orientador de
muchos evangélicos como católicos enseñando esto en seminarios e Institutos
Bíblicos.
|
IMPRESIÓN DELA PRIMERA BIBLIA |
Las Escrituras son muy
claras a la hora de afirmar que los cinco primeros libros de la Biblia (el
denominado Pentateuco) fueron obra de Moisés. En el mismo Pentateuco se indica
que Moisés lo escribió (Ex. 17:14; 24:4; 34:27; Nm. 33:1-2; Dt.
31:9 y 22) y este testimonio es repetido en otras partes del AT. (Jos.
1:7-8; Jue. 3:4; 1 R. 2:3; 2 R. 14:6; 21:8; 2 Cr.
25:4; Esd. 6:16). Por si fuera poco, el testimonio de Jesús (Mt.
8:4; Mr. 7:10; 10:5; Lc. 20:37; Jn. 5:47; 7:19, etc.) y de
los apóstoles (Hch. 3:22; 15:5-21, etc.) es unánime al respecto: el
autor del Pentateuco fue el que señala la Biblia, es decir, Moisés.
La
teología liberal ha insistido en que el libro de Isaías sólo fue escrito por
este profeta parcialmente. Según la misma, mientras que los primeros capítulos,
en todo o en parte, podían atribuirse a él, a partir del capítulo 40 nos
encontraríamos con la obra de distintos autores del siglo VI a.C., es decir,
posteriores al menos en dos siglos a Isaías. El NT niega rotundamente esta
posibilidad y así atribuye a Isaías textos cuya autoría niega la teología
liberal (Mt. 3:3 cita de Is. 40:3: Lc.
4 de Is. 61:1 ss; Mt. 8:17 de Is.
53:4; Mt. 12:17 de Is. 42:14). Una vez más se impone la disyuntiva
de elegir entre el testimonio de la Biblia y el de la teología liberal.
Dentro de los textos cuya autoría ha
sido negada de manera especial por los autores liberales se encuentra el libro
de Daniel. El propio Jesús lo atribuye a Daniel, un profeta del siglo VI a.C. (Mt. 24:15) Por el contrarío, la teología liberal
insiste en que no fue escrito sino en el siglo II a.C., por un autor
desconocido. Por lo tanto, sus profecías no son tales porque la obra fue
redactada con posterioridad.
La teología liberal no sólo cuestionó
los datos que la Biblia proporciona acerca del AT sino que además atribuyó, de
manera casi inmediata, el carácter de falsificaciones a los escritos del NT, pocos de éstos, según el liberalismo teológico,
habían sido redactados por sus autores ya que, en realidad, se debían a la mano
de otros personajes anónimos que se habían ocultado bajo los mismos.
Los conceptos que imparte la teología
liberal no serían cuestionados sino no existiera abundante material histórico
que echan por tierra todo tipo de argumentos contrarios a la doctrina ortodoxa
de la Biblia.
CAPITULO III
LOS ESCRITOS ORIGINALES
A.
PARA EL ANTIGUO TESTAMENTO.
Llamamos "Antiguo
Testamento" al conjunto de Libros Sagrados que los judíos denominan
tenakh. Torah, Nebi'im, Ketubim, que significa Ley, Profetas y Escritos, y que
constituyen, para judíos y cristianos, la más antigua fuente de revelación
divina escrita.
Lamentablemente los
escritos originales de la Biblia no sobreviven hoy en día, probablemente se
desintegraron a través del tiempo.
Los escritores de la
Biblia no grabaron sus palabras en piedras o metales; si no que utilizaron
materiales perecederos, los más antiguos se escribieron sobre papiro y mucho
más tarde los pergaminos, estos dos materiales de escritura estaban amenazados
por la humedad, el moho y varios tipos de gusanos, teniendo a desaparecer con
mayor facilidad el papiro.
Cuando los escritos
originales dejaron de existir, estas copias se convirtieron en la base de los
futuros manuscritos y así sucesivamente fueron haciéndose copias de otras
copias durante siglos.
LOS SOFERINES
El término hebreo que
traduce la palabra "copista" es So - Fér, que alude a la acción de
contar y registrar cada palabra. En el antiguo Israel ser copista o escriba
llegó a ser una profesión (Esd. 7: 6; Sal. 45: 1). Los copistas o
soferines eran gentes profesionales que vivían entregados a su labor. Sentían
profunda reverencia por las palabras que copiaban. Poco después de haberse
escrito los originales, se tuvo la necesidad de realizarse copias, de hecho que
en esos tiempos no existía la fotocopiadora, sino que las copias se hacían a
mano.
Se puede considerar a los “soferim”
como los predecesores de los “masoretas”. A su vez los soferines son los
herederos de los “Escribas” que copiaron los rollos bíblicos en la época del
exilio y el postexilio. Durante quinientos años los soferines fueron colocando
las bases para la futura vocalización y el establecimiento de una
“interpretación autorizada” rabínica.
Hillel (60 a.C.
- 20 d.C.), era
un sóferim, establecido en Jerusalén a
finales del siglo I a.C. Correspondió a la escuela de Hillel iniciar el proceso
para “oficializar”, en el seno del judaísmo, un grupo de textos de la Biblia
hebrea empleados en su nativa Babilonia. Ellos seleccionaron una sola tradición
textual, que puede ser llamada “Proto-Masorética” (anterior a los textos
masoréticos); un texto que ya llevaba existiendo homogéneamente algún tiempo
A partir de aquel momento existió una
fuerte tendencia entre los rabinos y escribas para no permitir que se
reprodujesen otras líneas de tradición
textual (de las Escrituras Hebreas), salvo los “Proto-Masoréticos los otros
fueron borradas a finales del siglo I d.C.
y comienzos del siglo siguiente,
tan sólo quedaron reflejos de estos textos, conservados en la versión de los
“LXX”, el “Pentateuco Samaritano” y en citas de escritos apócrifos o del NT.
El
personaje representativo del período posterior a la destrucción del Templo de
Jerusalén fue el rabino Akiba. Su mayor esfuerzo estuvo orientado a “fijar” el
texto consonántico de la Biblia hebrea. Akiba fue heredero del proceso iniciado
en la época de Hillel. Akiba, al igual que sus antecesores, mantuvo la
preocupación por la pureza textual, concretamente la conservación del texto
heredado de las escuelas rabínicas (el texto “Proto-Masorético”) y la “lista”
difundida por círculos fariseos. Para asegurar el predominio exclusivo de los
Proto Masoréticos se dictaron Leyes estrictísimas para su copiado.
El movimiento orientado hacia la
“pureza” del texto floreció en la segunda parte del siglo II d.C. bajo
el liderazgo de Akiba.
El biblista José Salguero
sostienen que en el “segundo período de la historia del texto hebreo del AT (siglo
I d.C. al siglo V d.C.) se caracteriza por la fijación definitiva del texto
(consonántico). Se elige una recensión y se eliminan las variantes,
quedando así fijado un texto uniforme que prevalece sobre los demás y se
propaga rápidamente. Ello fue obra de los ‘sóferim’ o escribas, y será
perfeccionado por los masoretas”.
LOS MASORETAS
El
término “masorah” deriva de la raíz hebrea “atar”. Otros
consideran que viene del verbo “transmitir”. El término “masorah” significa
“tradición”. La
“masorah” comienza a desarrollarse alrededor del año 500 de la era cristiana y
tiene vigencia hasta el año 1000 D. de C.
A partir del siglo VI los “masoretas”
toman el lugar de los “sóferim”, los antiguos Escribas, a cuyo cargo estuvo el
cuidado y transmisión del texto bíblico. Además de la labor de copiado, los
masoretas introdujeron un aparato textual a cuya luz se interpretó la Sagrada
Escritura. Los eruditos hebreos se dedicaron a incorporar y unificar las
tradiciones de puntuación, vocalización, acentuación y división de los textos
en hebreo, hasta ese momento de estructura consonántica. Sus copias manuscritas se llamaban "textos
masoréticos".
La
masorah cumple una doble función:
- Conservar la integridad
del texto.
- Interpretar el texto.
Existieron tres “tradiciones” o
“escuelas” de masoretas: una en Babilonia, otra en Palestina
y otra en Tiberiades (Galilea). Con el pasar de los siglos fue imponiéndose
la “tradición tiberiense”. En Tiberiades convivieron a su vez dos
“corrientes”, la de la familia de los Ben Aser, y la de los Ben
Neftalí. Cada una representaba ciertos rasgos propios. Entre ambas
prevaleció la de Ben Aser. El más famoso de los Ben Aser fue el
último expositor de la escuela, Aaron Ben Moisés Ben Aser.
A esta familia se atribuyen los Códices de Alepo y de San Petersburgo (los
textos masoréticos de mayor antigüedad disponibles).
Los masoretas asumieron la
responsabilidad de realizar las copias de las Escrituras del AT. A fin de
comprobar su trabajo, los masoretas utilizaron diversos sistemas. Para no
omitir ni una sola letra del texto bíblico, iban al extremo de contar tanto las
palabras como las letras de cada libro, y después de copiar un libro, contaban
las palabras de la copia, para estar seguros de que no habían omitido ni
añadido palabra alguna a la copia.
Para darnos una idea de lo que hacían los
masoretas para preservar las escrituras, enlisto una serie de condiciones que
seguían a la hora de realizar su trabajo de copiar un manuscrito de las
Escrituras del AT a otro. Estas características, a ti y a mi nos deben dar un
alto nivel de confianza en las traducciones fieles que tenemos de la Biblia hoy
en día lo que viene a corroborar el origen sobrenatural de la Palabra puesto
que ningún otro libro de la historia, es ni ha sido transmitido como la Biblia.
1.
Las pieles de los animales que se utilizaban para un manuscrito
debían ser de animales limpios.
2.
Las pieles debían ser preparadas por un judío.
3.
Las piezas de pieles se debían unir por hilo hecho con pelo de
animales limpios.
4.
Cada pergamino debía tener la misma cantidad de columnas y ellas
del mismo tamaño.
5.
Las columnas debían tener un ancho de 30 letras y no menos
de 48 o más de 60 renglones.
6.
La columna debía iniciar con una letra completa y terminar con no
menos de 4 palabras.
7.
La tinta debía ser negra preparada de una forma especial.
8.
El copista estaba obligado a escribir todo copiando sin hacer nada
de memoria.
9.
El espacio entre consonantes debía medirse con el ancho de un hilo
o de un cabello
10. El espacio entre
secciones debía ser igual a nueve consonantes.
11. Entre cada libro
debían dejarse tres renglones de espacio.
12. El quinto libro de
Moisés debía terminarse con una línea completa.
13. El nombre de Dios
no debía escribirse con una pluma recién empapada y.
14. El escriba al
copiar el manuscrito debía estar vestido con un atuendo judío completo.
Como vez ¿Es o no
confiable las copias del AT del texto masorético?
Se dice de los masoretas,
calcularon que letra se encontraba a mitad del Pentateuco, que frase se
encontraba a mitad de cada libro y cuántas veces aparecía en las Escrituras
hebreas cada letra del alfabeto; pues se afirma que contaban las 815,140 letras
de las Escrituras hebreas. Tal minuciosidad garantiza un alto grado de
fidelidad en la preservación y
pureza del texto original del AT. de la Palabra de Dios.
A.
PARA EL NUEVO TESTAMENTO.
En los orígenes de la
Iglesia, la regla de fe se encontraba en la enseñanza oral de los apóstoles.
Pasado el tiempo, se sintió la urgente necesidad de poner por escrito las
enseñanzas del Señor Jesús y los rasgos más sobresalientes de su vida. Este fue
el origen de los evangelios.
Por otra parte los apóstoles
alimentaban espiritualmente a los fieles mediante cartas, según los problemas
que iban surgiendo. Este fue el origen de las Epístolas.
A mitad del siglo I comenzaron a copiar y
coleccionar los escritos divinamente inspirados de los apóstoles y profetas
novo testamentarios. Donde, primero quizá Roma conocía el Evangelio de Marcos
(que, como acompañante y expositor de Pedro, escribió allí) y Siria tenía el
Evangelio de Mateo, mientras que un grupo de creyentes de diversos pueblos
poseía el de Lucas, y Éfeso el de Juan, allí parecen ser ensamblados estos 4
evangelios, a fines del siglo I, en un sólo volumen que fue llamado “El
Evangelio”. Por aquella época, las cartas que Pablo había escrito a
varias iglesias y personas ya estaban coleccionadas, y una colección circuló
por las iglesias bajo el titulo de “El Apóstol”. En
esta colección, el libro Los Hechos de los Apóstoles era muy interesante como
ilustración; era un escrito de Lucas, que con su Evangelio debe haber formado
un solo libro. Junto a estos volúmenes, las cartas de otros apóstoles y de
“hombres apostólicos" así como Apocalipsis de Juan, fueron reconocidas
como de origen divino y admitidas en el canon del NT Ya en el
siglo II d.C. la Biblia no sólo estaba completamente
escrita, sino que también comenzó a circular en volúmenes completos. Esta
Biblia contenía el AT en la versión griega Septuaginta, y el NT griego en el
que había sido escrito. Cuando en el siglo III, surgió el códex (Códice), por
primera vez fue posible compendiar la Biblia en un solo volumen. De tales
Biblias no ha quedado conservada ni una sola completa, en parte porque el
material usado era casi siempre el perecedero papiro, y en parte porque algunos
césares (en concreto Diocleciano, finales del siglo III) dieron batidas contra
la Biblia y destruyeron grandes cantidades de ellas.
CAPITULO IV
LOS MANUSCRITOS
Los manuscritos son copias hechas a
mano sobre pergaminos de piel de
cordero, de cabra o de asno.
A. MANUSCRITOS DEL ANTIGUO
TESTAMENTO
Antes del descubrimiento de los
manuscritos del Mar Muerto a partir de 1947, no poseíamos manuscritos del AT anteriores
al siglo IX y X d.C. La colección más completa existente hoy de esos
manuscritos es la de la Biblioteca de Leningrado, organizada por el judío ruso
Abraham Firkowitsh (1785-1874).
Mencionemos
algunos de los más importantes de ellos, que han servido en el pasado para la
construcción del texto hebreo:
Ø El códice del Cairo (siglos VI
- VII d.C.), contiene los profetas. En 1896 se descubre en una cámara de la
sinagoga de El Cairo llamada genizah, donde se almacenaban los manuscritos
bíblicos que ya no servían para el uso litúrgico unos 200.000 fragmentos
Ø El códice de Alepo (año 930),
está actualmente en Jerusalén; contiene todo el AT.
Ø El códice de Leningrado (año
1008), fue la base del texto hebreo de la Biblia de Kittel, que ha servido de
base de muchas traducciones.
Ø El códice del Pentateuco del
Museo Británico (año 916).
Ø El códice Reuchlin de los
Profetas (año 1105).
Ø El pequeño papiro de Nash
(siglo I o II a.C.), contiene una parte del Decálogo y el comienzo de la
perícopa de Shemá (Oración que los judíos debían recitar todos los días),
descubierto en 1902 en Egipto.
Hay muchos otros manuscritos, más que
todo fragmentarios. Estos son los más importantes que nos trasmiten el
texto masorético. Pero, con los descubrimientos de los rollos del Mar
Muerto en el desierto de Judea a partir del año 1947, (Ver capítulo VII Los manuscritos de Qumrán). Digamos sólo que
contienen copias de prácticamente todos los libros del AT y que algunos de sus
manuscritos se remontan a los siglos I, II y posiblemente al III a.C.
B. MANUSCRITOS DEL NUEVO TESTAMENTO
Se conocen más de 5.300
manuscritos griegos antiguos que contienen el texto (completo o incompleto) del
NT Además han sobrevivido hasta hoy unos 10.000 manuscritos antiguos con copias
del NT en latín y otros 9.300 con versiones en siríaco, copto, armenio, gótico
y etíope, totalizando más de 24.000 manuscritos antiguos del NT, una cantidad
mucho mayor que la correspondiente a cualquier otra obra literaria de la
Antigüedad, exceptuando el AT. Las variaciones del texto encontradas en estos
manuscritos son muy pequeñas y en lo sustancial no afectan a las doctrinas
cristianas principales.
Los papiros, por su antigüedad,
son muy importantes en la historia de la transmisión del texto. Los más
importantes son:
Ø El
papiro Ryland, descubierto por Roberts en 1920 y publicado en 1935. Es el
fragmento más antiguo del NT. fue hallado en Egipto y contiene unos versículos del
Evangelio de Juan (Jn. 18: 31-33;
37-38); los papiros se conservaron mejor en Egipto gracias al clima muy seco,
desde unos 50 años, los expertos se han fijado en los papiros que rellenaron a
las momias de ese país. Se dice que cuando había un muerto y deseaban
embalsamarlo y convertirlo en momia según su costumbre, se sacaban sus entrañas
y después se rellenaban con toda clase de papiro que se tenia a la mano, así
pues este evangelio de Juan que fue escrito después que los otros tres evangelios,
se encontraba ya de definido entre los siglos I y II d.C.
Ø Los fragmentos descubiertos
por M. A. Chester Beatty, se trata de unas 30 hojas con pasajes de los
evangelios y los hechos.
Como señalan los especialistas, establecer la lista
de los papiros neotestamentarios no ha sido una tarea sencilla. Sólo después de
muchas publicaciones y artículos se ha llegado a establecer la relación
definitiva de estos papiros.
Es en 1947 cuando E. Brady invitó a los científicos
a componer ya una lista de los papiros griegos del Nuevo Testamento. Su
sugerencia fue aceptada por Metzger, quien ese mismo año publicó una primera
lista de papiros en griego correspondientes al NT, lista que cifró en un total
de 54 papiros. En 1951 otro especialista, llamado Maldfeld, elevó la lista a
62.
En la actualidad la lista de
papiros del NT asciende a la cifra de
116. Estos papiros están numerados, y se les conoce por la letra P
seguida de un número: P1, P2, etc.
Bibliografia: by Geycer Paredes